1991, Antes de aquel día, yo no sabía que existía algo llamado guerra. En la mañana en el jardin de niños, mi clase y yo nos enterabamos que había iniciado la guerra, el pequeño radio en la mesa de la maestra nos estaba anunciando los hechos con los que el mundo había despertado.Yo ni siquiera entendía dónde quedaba aquel lugar, sólo recuerdo que mi maestra preocupada nos decía que pensaramos en los niños como nosotros y en lo que deberían de estar sufriendo.
He decidido dedicar este post a la Tormenta del Desierto como también se le conoció; y ha sido así puesto que ha sido el primer enfrentamiento armado del que me he enterado en mi vida y con el cual conocí las capacidades destructivas del hombre.
En esos años mi edad era la precisa para estar en preescolar, la noticia fue aterradora y además fue confirmada cuando por la noche ose desafiar la hora de ir a la cama por ver el noticiero de la noche, el pequeño televisor del comedor (que por cierto era a blanco y negro) me dejaba ver una serie de imagenes que no comprendía muy bien que significaban, le preguntaba a mi madre sobre las luces que veía de un lado para otro y le decía que no entendía que veía, todo esto mientras la voz del cronista del noticiero hablaba de conflictos y lugares y presonajes que yo desconocía por completo.
Este hecho me marcó mucho, mi incomprensión geográfica se unió a mi corta inexperiencia para apreciar un suceso bélico televisado provocando que el miedo se apoderara de mi por momentos al creer que en algún momento alguno de estos soldados que aparecían en el televisor se escondía en mi patio y en cualquier momento atacaría disparando con su ametralladora.
Ahora mucho tiempo después, 18 años para ser precisos, entiendo que fui presa de los medios masivos, que aquella maestra que preocupada nos alertaba del suceso debió haber sacado un mapa mundial en donde nos señalara donde se encontraba el Golfo Pérsico, puesto que yo ingenuamente no imaginaba que este se encuentra en el Medio Oriente, bastante lejos de casa y que era un suceso que involucraba politicamente la búsqueda del control sobre el petroleo.
Si bien mi experiencia vivencial y naive sobre este hecho resulta conmovedor existe la otra parte que no lo es tanto y que si bien mi exoperiencia sirve para hacer referencia de algunos de los detalles importantes sobre este acontecimiento bélico.
Esta fue el primer movimiento bélico que se presentó y que pudiera ser considerado televisado en el mismo momento en el que sucedía, las grandes compañías de noticias internacionales despuntaban y los sistemas satelitales nos premitían ver por la noche en el noticiero los secesos del día. Ver como ser disparaban de un lado al otro balas y misiles que destruían casas, edificios gubernamentales, algunos civiles siendo lastimados, ver evacuar areas habitadas podían formar parte de este resumen diario.
Ahora bien, pensemos en el modo en que las imagenes eran televisadas, si bien mis recuerdos sobre estas imagenes en su mayoría se componen de escenas donde todo está en negro y sólo luces blancas (porque les recuerdo era el televisor blanco y negro) parpadeantes de un lado para otro, y de vez en cuando vistas de los aviones, era una transmisión que pudiera considerarse limpia de imagenes de destrucción, de imagenes que nos mostraran la crudeza de la guerra, era una de las primeras ventanas a un mundo paralelo viviendose, en el cual el cuidado y tratamiento de imagenes no nos mostraba del todo esas imagenes descompuestas por la guerra, el dolor y el sufrimiento se resumía con las imagenes de la debastación de los misiles.
Esto indicaba el inicio de lo que la propia televisión nos traería después, imagenes a las cuales actualmente estamos acostumbrados e inclusive nos mostramos un tanto insensibles ante lo que vemos en el televisor a la hora de la cena o en la comida al ver el noticiero que ahora si bien en ese afán de ser verídicos nos muestran imagenes desgarradoras de los sucesos que pasan durante un enfrentamiento bélico, el cual nos tiene casi inmunes ante el dolor de los otros, de los que estan ahí del otro lado del mundo.
¿Qué nos ha hecho la televisión? ¿Nos ha vuelto seres completamente insensibles hacia los otros?
Ahora bien me quiero ocupar de algo más, algo importante sobre este movimiento, si bien ha sido uno de los más importantes de la década de los noventa, es necesario reclacar la manera en que la información vuela y como los medios masivos se han encargado llevarnos al momento justo de la acción y como además también lograrnos contactar con el momento en que lo estamos viendo, es decir, podemos ver en la televisión a un reportero de guerra dentro del campo de batalla transmitiendo en vivo mientras a lo lejos se pueden ver misiles volar.
¿Qué ha pasado con los medios masivos?
¿Es necesario que estemos viendo el momento en que sucede, para saber que estamos siendo enterados?
¿Nuestra hambre de consumir noticias, y problemas nos lleva al moemento exacto y nos empuja cada vez mas a sentirnos en el lugar para saber que lo que nos dicen es verdad?
Me pregunto cuanto es necesario para estar informados, y hasta dónde es el límite de las imagenes y su contenido además de preguntar en que punto nos encontramos para poder ver aquellos problemas bélicos.
Como iniciaba este post, considero a este problema bélico interesante para ser presentado y traido a la memoria para ver la importancia de los problemas bélicos y su difusión televisiva, también para hacer reflexión sobre lo que las imagenes nos dicen sobre ellos.
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